Es preciso pararnos a pensar el camino a seguir.
Porque somos tan pequeños.
entre tanta grandeza,
que no podemos darnos el lujo
de que el alma se pierda.
Es preciso, pararse frente a la vida,
con mas dudas que certezas;
intentar encontrar la paz del corazón,
acercarnos al cielo de alguna manera.
Y que las dudas se conviertan
en pájaros que emigran hacia el norte,
encontrando un rumbo.
Y que las certezas se deshagan
en el vuelo temprano,
en la mirada templada.