15 feb 2012

Sinceridades

La vida me ha enseñado
que cada uno llora 
como mejor puede-.

No hay lagrimas en algunos llantos,
ni hay alarmas, ni hay aplausos,
ni siquiera hay oscuridades.

Hay gente que llora a plena luz riendo,
pelando una cebolla,
en la ducha, mientras el agua se confunde con las lágrimas.

Hay gente que para llorar se emborracha,
sale de fiesta y no regresa,
prende un cigarro o un porro, 
bailando salsa o musica electrónica.

Hay personas que para llorar come, 
y personas que no pueden comer 
de la tristeza.

Y hay gente que llora mientras se desnuda, 
gente que precisa de un hombro 
o de un colchón.

Y hay otra gente como yo, 
que lloran con el alma,
que lloran con la voz.


1 comentario:

La Jose dijo...

y hay gente como yo, q trata de no llorar aunque las lagrimas lo inunden a uno hasta el limite. Hermoso lo q escribis vero!

Si el arte es indefinible, para que defender lo indefendible?